lunes, 30 de marzo de 2009

Adiós al Maestro


Como en este blog también tienen sitio los obituarios, me es necesario recordar la figura de Maurice Jarre a los 84 años en Los Angeles, ciudad donde residía tras obtener la nacionalidad estadounidense. Entre los muchos premios que jalonaron su fructífera relación con el séptimo arte destacaron los tres Oscars obtenidos por Lawrence de Arabia, Dr. Zhivago y Pasaje a la India, siendo el único compositor que ha obtenido tres estatuillas. Sólo estas tres bandas sonoras bastarían para que Jarre ocupara un lugar en la Historia del Cine, ésa que es obligado escribir con mayúsculas y de cuyas lecciones debería aprender tanto anodino compositor actual. Como no soy un especialista en la materia, les remito a los artículos que en su día escribieron o escribirán ahora Carlos Colón y/o Manuel J. Lombardo, amigos y verdaderas enciclopedias andantes de bandas sonoras. Aunque menos conocidas que las anteriores, me gustaría citar entre su amplio repertorio las piezas compuestas para El club de los poetas muertos, Único testigo -Jarre fue habitual en muchas de las películas de Peter Weir-, Ghost, La caída de los dioses o El hombre que pudo reinar. Jarre tuvo un hijo, Jean-Michel, que tuvo cargar como otros vástagos de mitos vivientes con el sambenito de la sombra alargada de su progenitor. Quizá por eso se especializó en los sintetizadores desviándose de la tradición clásica de Maurice. A pesar de sus muchos detractores, uno recuerda con la ilusión de sus poco más de veinte años aquel concierto del 93 en la Sevilla post-Expo, todo un espectáculo de luz y sonido que entonces nos parecía la creación de un futuro no muy lejano, de alguien venido del espacio con ganas de borrar todo lo que se había hecho antes.

2 comentarios:

  1. Llego a tu blog, que no conocía, por mediación de Antonio Rivero Taravillo. Volveré a menudo. Saludos desde El baile de los silenos.

    ResponderEliminar
  2. Gracias por la visita. Al final no he podido resistir la tentación. Me parece una estupenda ventana para decir lo que piensas.

    ResponderEliminar